martes, 24 de abril de 2012

El BCE "regala" dinero público a los bancos para que tapen sus agujeros negros.


Recientemente, el Banco Central Europeo (BCE) (que obtiene sus ingresos de los impuestos de los ciudadanos de la zona euro) ha inyectado cantidades ingentes de dinero a centenares de bancos europeos. En concreto, el pasado 21 de diciembre prestó 489.190,75 millones de euros al 1% y a devolver en tres años, a 523 bancos europeos, lo que suponía la mayor inyección de liquidez a los bancos de toda la historia. A pesar de la magnitud de la cifra y las más que ventajosas condiciones, todo parecía indicar que la situación de crisis económica internacional lo requería. Supuestamente, el objetivo de este "préstamo regalado" era, entre otros, que el dinero llegase a la economía real, de forma que los bancos facilitasen el crédito a las familias y pequeñas empresas, motores del consumo mundial.


Mario Draghi, Presidente del Banco Central Europeo
No sólo no ha sido así, sino que además nadie ha tomado cartas en el asunto. Todo lo contrario. El pasado 29 de febrero, apenas dos meses después de la mayor inyección de la historia, el BCE volvió a superarse así mismo prestando dinero a 800 bancos de la eurozona. Esta vez por valor de 529.000 millones de euros. Es decir, que en apenas dos meses el BCE ha prestado en condiciones sumamente ventajosas a la banca privada la nada despreciable cifra de 1 billón de euros (1 millón de millones de euros). Para Mario Draghi, (Presidente del BCE), la intención de esta medida es relanzar la economía haciendo circular el dinero, que contrasta con la opinión de Ángela Merkel (canciller alemana), convencida de que no debe ser así, ya que hay que evitar la inflación. Parece que ninguno de los dos quiere entrar en el fondo de la cuestión, y se pierden en un diálogo periférico.


Supuestamente, estas dos inyecciones de liquidez tenían como objetivo facilitar el crédito a familias y pymes. Sin embargo, la realidad es bien distinta. En la mayoría de los casos ese dinero que el BCE inyecta a los bancos con los impuestos de todos, tiene como destino final "sanear las cuentas" de las entidades bancarias para cubrir "sus necesidades de financiación e inversión". Vamos, que nos toca a los ciudadanos pagar los gazapos cometidos por los bancos en los últimos años. Esta irregularidad parece connivir tácitamente con la mayoría de medios de comunicación y con partidos políticos de cualquier color, y en el caso español sin distinción entre PSOE y PP. De momento el crédito fluye con cuentagotas y parece que nadie se lanza a poner el cascabel al gato.


No dejaría de ser anecdótico si no fuera porque esos fondos son de los mismos ciudadanos a los que luego los bancos prestarán ese mismo dinero, sacando además un beneficio por ello. El chollo es redondo. Para ser más claros, el BCE presta nuestro dinero a los bancos y le cobra por ello un 1%. Luego los bancos nos prestan a nosotros ese mismo dinero (por supuesto pidiéndonos como aval no sólo la nómina, sino todo tipo de bienes, independientemente de la cuantía de crédito que solicites) y encima nos cobran por ello un 5 ó un 6%. Vergüenza tras vergüenza.


Se me ocurre otra posibilidad… Que el BCE deje directamente el dinero a empresas y familias al 1%, facilitando el acceso al crédito de forma responsable. De esta manera, en vez de tapar los agujeros negros de los bancos, nos acercaríamos más al objetivo de reactivar el consumo y crear empleo.

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